El deporte a través del juego, el seguimiento de instrucciones y el trabajo en equipo puede ayudar positivamente a los niños a desarrollar habilidades sociales y moralidad.

En cuanto a las habilidades sociales, se trabaja la cooperación y la comunicación para lograr un objetivo común con tu equipo, así como relaciones interpersonales positivas, de respeto y resiliencia ante un mal resultado. Es importante enseñar que no siempre se logra el resultado esperado, sin embargo con perseverancia y entrenamiento duro se puede obtener un mejor resultado ya que siempre existe la posibilidad de volver a intentarlo.

Además de las habilidades sociales, trabajan su moralidad, valores importantes como la honestidad, la responsabilidad, el trabajo duro, el cumplimiento de las reglas y el respeto a las decisiones de las autoridades como árbitros/entrenadores. También se desarrolla el sentido de juego limpio que se refiere a jugar con integridad y ética deportiva de manera fraternal hacia los oponentes.

El deporte, además de ser divertido y beneficioso para la salud, también puede ser de gran ayuda en la educación de los niños, creando en ellos importantes valores y aportando lecciones de convivencia y esfuerzo que serán de gran utilidad a lo largo de su vida.

×